Al verlo pensé que podría aprovecharlo y hacer un colgador de collares para poner en una pared de la habitación.
Lo primero fue cortar la parte aprovechable.
Después en el taller le quité el barniz y le di un buen lijado.
A continuación procedía un tratamiento anticarcoma y tenerlo un tiempo metido en una bolsa de plástico cerrada, para que el producto funcionase.
Con la pistola de pintar le di una capa de tapaporos.
Como tenía una pieza que había cedido, con unos gatos, la llevé al sitio.
Ya con las capas de pintura aplicadas era cuestión de ir aplicando el pan de oro.
Lo apliqué en todas las partes de talla que tenía el respaldo de la silla, ya sabéis el gesso, mixtión.....
A la hora de poner los pomos para colgar los collares es mejor que no sobresalgan los tornillos por la parte de atrás.
Ahora solo quedaba colgarlo a la pared.
Este es el resultado.
Iba al contenedor de la basura y ahora es un útil y decorativo colgador de collares.
Espero que os guste y os de alguna idea que podáis aplicar.
Saludos.
Un colgador digno de la realeza! Como siempre, un gran trabajo. Aprovecho para desearte Felices Fiestas!!! Besazo gordo.
ResponderEliminarCuanto tiempo......me alegra que sigas por aquí, Felices Fiestas igualmente.
ResponderEliminarUn beso.
Me gusta mucho todo lo que haces. Tu trabajo y tus ideas.
ResponderEliminarGracias por tus palabras.
EliminarUn beso.
Una idea muy original, la verdad es que el respaldo de la silla era bastante apropiado para hacer algo interesante con él, cosa que por supuesto has conseguido.
ResponderEliminarMe quedo como seguidora de tu blog, al mismo tiempo que te invito a visitar el mio, te dejo el enlace por si te apetece.
Un saludo
Ana
http://elblogdelarestauradora.blogspot.com.es/
Gracias por seguir mi blog, ahora me paso por el tuyo.
EliminarSaludos.
Espectacular!!!
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